Gracias por estar aquí hoy, agradeció reverente el ministro de Cultura, Alpidio Alonso, a uno de los numerosos artistas de la plástica, de varias generaciones, que este 24 de Febrero se reunían frente a la sede de ese ministerio, en la capital del país.
Y la respuesta, en forma de pregunta, fue reveladora: "¿Gracias por qué?
Y el mismo creador la respondió: "Aquí es donde tenemos que estar hoy, es nuestro deber, darle calor y fuerza a nuestra casa".
Era una mañana soleada y tranquila, con el sonido tenue y poético de los pinceles trayéndonos a ese Martí tan unitario como diverso también en la pintura. Devolviéndonos, con tantos trazos atrevidos, ese sentido apostólico, siempre revelador, de anunciación, de una figura que es cenital para el patriotismo, la cultura y el periodismo en Cuba.